INDUSTRIA: Impulsa nueva oferta inmobiliaria la construcción vertical de la ciudad


- Proyectos inmobiliarios enfocados en el crecimiento vertical, lo cual, aseguran, ayudará a controlar la ampliación de la mancha urbana hacia las periferias.

Más de 7 mil millones de pesos son invertidos actualmente en al menos 16 complejos verticales que se construyen en la capital de Sonora, los cuales cambiarán la fisonomía urbana de la ciudad, de acuerdo con expertos y autoridades.
Las construcciones que se edifican hacia el Norte, Sur, Oriente y Poniente de la ciudad van desde los cuatro y hasta los 22 niveles, entre los que se encuentran torres de departamentos, oficinas, inmuebles comerciales y hoteles.
Para las autoridades municipales y estatales, este crecimiento se debe a la confianza de los inversionistas en la economía de la ciudad; mientras que los especialistas dicen que es una tendencia internacional y destacan el potencial que tiene Hermosillo para este tipo de obras.
“Desde el punto de vista de desarrollo como ciudad es algo que creemos que la ciudad necesitaba, especialmente tomando en cuenta que en los últimos 20 años el crecimiento que tuvo fue muy exponencial pero de manera horizontal”, apuntó Rodrigo Cota Estévez, vicepresidente del Colegio de Arquitectos de la Ciudad de Hermosillo.
TAMBIÉN A OFICINAS
Jaime Isaac Félix Gándara, presidente de la Cámara Nacional de Vivienda (Canadevi) en Sonora, resaltó que la nueva oferta inmobiliaria no está sólo enfocada en construir casas o departamentos, sino también en espacios para oficinas que pudieran atraer a grandes empresas.

“CREEMOS QUE EL MERCADO A LO MEJOR SE VA A TARDAR EN ADAPTARSE UN POQUITO A VIVIR EN ESTE TIPO DE COMUNIDADES, PERO CREEMOS QUE SE VA A LOGRAR PORQUE ES LA MEJOR FORMA, NO SOMOS PIONEROS EN ESTO, EN REALIDAD ESTAMOS SIGUIENDO UNA TENDENCIA MUNDIAL DE ESTE TIPO DE PROYECTOS VERTICALES”.
Por un tiempo, el desarrollo inmobiliario vertical de Hermosillo estuvo reservado sólo para oficinas y hoteles. Desde hace unos años, la ciudad también ha empezado a mirar hacia arriba para ofrecer vivienda, pero esta opción todavía no es asequible a todos los estratos sociales.
Opina que más que hablar de diversificación en términos de estratos económicos, las construcciones deberán adecuarse a los segmentos demográficos. Como ejemplo, cita que no son iguales las exigencias de los millennials solteros que las de parejas jóvenes sin hijos, como también son distintas las necesidades de una familia completa o de un matrimonio de personas mayores donde ya los hijos salieron de la casa.
Para Félix Gándara el tema de la vivienda vertical aún debe ser visto con cautela y no declararse un «boom» como tal, aunque considera que los inversionistas han sentado las bases para ir en esa dirección.
“En 10 años va a ser otra ciudad: Hermosillo verdaderamente va a cambiar, y cuando llegues en un avión vas a ver muchos rascacielos”, dice. “Ahorita, en realidad, se están proyectando rascacielos hasta más de 25 pisos”.
Esta eficiencia, explica, se orienta principalmente a los servicios, pues entre más se amplía la mancha urbana hacia las periferias, mayor es el costo de llevar a esas zonas el agua, el alumbrado público, la seguridad y la recolección de basura.
En cambio, el crecimiento hacia arriba permite una ciudad más ordenada donde, asegura el funcionario municipal, se favorece el desarrollo en comunidad y con mayor seguridad, contrario a lo que pudiera pensarse.
Para Roberto Pérez Salman, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Sonora, esta nueva oferta inmobiliaria obedece a un crecimiento natural para una ciudad como Hermosillo, aun cuando, agrega, pareciera que ha ocurrido “como de golpe”.

“Yo siento que lo que nos va a marcar esa tendencia es la aceptación porque finalmente todos esos son inmuebles con los que se quiere tener una rentabilidad y para poder satisfacer una necesidad”, menciona.
Por ahora, coinciden los especialistas, el desarrollo en varios pisos está concentrado en viviendas y departamentos de tipo residencial, así como locales comerciales y oficinas para grandes corporativos.
El vicepresidente del Colegio de Arquitectos de la Ciudad de Hermosillo, Rogelio Cota Estévez, estima que el crecimiento continuará en ese sentido y que, poco a poco, se adecuará a otros sectores, hasta llegar a la vivienda vertical de interés social.
Explica que en Hermosillo aún no está probada la fórmula de vivir en edificios, y construir edificios para hogares de bajo costo podría tener el mismo efecto que cuando se crean nuevos fraccionamientos en las periferias.
“Hay que llevarlo tranquilo, yo creo en los estudios, para no tener estos monstruos o elefantes blancos, que luego vemos edificios abandonados y sabemos que un edificio abandonado, una casa abandonada, es un foco de posible crecimiento de actividades ilícitas”, argumenta.